Soy de las que se emocionó y encantó con el primero de Falcones, La Catedral del Mar. Obviamente me leí acto seguido La Mano de Fátima, y La Reina Descalza. Me devoré las 1000 páginas de cada uno de sus libros.
Hace dos años lanzaron, con gran publicidad, la segunda parte de La Catedral del Mar: Los Herederos de la Tierra. Y a esas alturas, me pareció demasiado "kennfolletiano". Una segunda parte con exactamente la misma estructura, personaje protagonista bastante parecido al anterior, hombre sacrificado que lo pasa pésimo al comienzo (durante su niñez), luego emprende, le empieza a ir mejor, tiene algún interés romántico, y cuando en la mitad del libro al tipo le sonríe la vida, solo queda pensar que de ahí en adelante volverá a pasarlo mal, y tendrá que volver a levantarse. Suena conocido?
Bueno, El pintor de almas es algo similar. Solo que en vez de ser albañil, el tipo es pintor. Ambientada a comienzos del siglo pasado, narra toda la vida del pobre infeliz que parte de abajo, llega a la gloria para volver a caer, y volver a levantarse.
Tal vez lo más atrayente es con la pasión que Falcones describe Barcelona. Se nota que conoce y ama esa ciudad.
Pero se repite demasiado la estructura, las desventuras, los personajes malos (sin muchos matices), la redención del protagonista, y de repente alguna escena pseudo erótica que no convence.
Sirve para las vacaciones, eso si.